domingo, 27 de abril de 2014

30 años juntos

Y parece que fue ayer, toda una vida con vosotros, grandes hombres, un orgullo, falta Peter pero en verano nos haremos otra.

jueves, 3 de abril de 2014

Deseando que sea así. Me apunto para el 2015

Diario La Opinión

Fortalezas llevadas al límite

Siete infantes de Marina participan mañana en una experiencia piloto denominada Ultra Trail, una prueba de 111 kilómetros que tiene como objetivo sentar las bases de esta carrera, que se disputará por primera vez el próximo año.

Se pondrían como reto recorrer 111 kilómetros de costa cartagenera en 22 horas? Pues eso es lo que van a hacer cinco militares, quienes junto a dos acompañantes como equipo de apoyo, pretenden sentar las bases de la que a partir del próximo año se convertirá en la prueba de trail más importante de la ciudad. Aún todavía por dar el nombre definitivo, ahora se la conoce como Ultra Trail de las Fortalezas, convivirá con la actual Ruta de las Fortalezas, pero será más larga, mucho más exigente y, sobre todo, destinada a atletas experimentados.

La idea parte del origen de la Ruta de las Fortalezas. El trazado de la Ultra Trail era el primigenio de la prueba, que cumple ahora su quinta edición, pero que posteriormente fue recortado para que resultara más atractiva y encauzada, por tanto, a más participantes.

La misma recorrerá la zona oeste de Cartagena, entre ellos algunos de los senderos del GR 92 –el cual transcurre por caminos, sendas y viales a lo largo de todo el litoral mediterráneo, desde la frontera con Francia, en Port-Bou, hasta su enlace con el GR 7 en Tarifa– y del PR RM 7.

Este grupo, compuesto por el comandante Emérito Álvarez, el subteniente Antonio Peñalver, el brigada Francisco Belmonte, el sargento primero Juan Carlos Vela y el sargento Fructuoso, parte mañana viernes a las ocho de la tarde desde Héroes de Cavite y tiene el objetivo de acabar el sábado a las seis en la explanada de la Escuela de Infantería de Marina. Explica Peñalver que el reto es marcar las pautas del recorrido –determinar las cuatro barreras horarias de la carrera, mediciones de altitud y distancia, etc..– que servirán para elaborar el informe con el que entrar en el ránking internacional de pruebas de ultra trail y que pueda ser homologada como tal.

Su trabajo de campo es experimental, previo al de los siguientes años, pero necesario para confirmar que es una prueba segura y perfectamente realizable.

Si todo se ajusta a sus parámetros y obtienen los permisos medioambientales y de organismos oficiales, se abrirá la veda para los atletas que compondrán esta primera carrera en 2015. Serán entre 300 y 400 y deberán acreditar –por tiempos o participaciones en otras pruebas similares– que están capacitados para llevarla a cabo.

Dicen que es una experiencia única que quieren hacerla extensiva a los demás, pero son conscientes de la dificultad del trazado –4.500 metros de desnivel acumulado–.

Harán un reportaje fotográfico de su experiencia: «La sensación de andar por el monte de noche es fabulosa, casi como lanzarse de paracaídas», admite el subteniente Peñalver.

Estos cinco decididos infantes de Marina lo asumen con entusiasmo, pero la responsabilidad es máxima. No obstante, reconocen que los infantes de Marina «hacemos de nuestra profesión un estilo de vida».